viernes, 1 de septiembre de 2017

LA ACTITUD EMPÁTICA SIEMPRE RENTABLE



Hugo R. Fernández Campos
Empresario, Conferencista, Político



“Un sueño con actitud proactiva
 abre un espectro ilimitado 
para ser feliz”.

Una buena actitud ha  propiciado mejoras sustanciales en enfermedades como el cáncer y otros padecimientos fatales. 

La actitud empática en la prestación de servicios y en áreas de atención al cliente compensa fallas en la presentación de los productos. La empatía significa ponerse en los zapatos del cliente, saber que pagara por una mercancía o un servicio y que por tanto se debe aspirar a su total satisfacción,  ese será el gran propósito en los procesos de emprendimiento.

Una actitud apática implica indiferencia y desprecio por el otro u los otros. En la política una actitud apática redunda en la no participación ciudadana en los comicios electorales por ejemplo, los jóvenes entre los 18 y 30 años en México significa casi el 30 % del padrón nominal electoral que habitualmente no sufragan y la otra parte de la votación, que tampoco participa con el argumento de todo seguirá igual da como resultado niveles de abstención de arriba del 50 %, con ello los candidatos electos ganan apenas con el 20 % de los padrones nominales, si bien estos triunfos son legales terminan siendo ilegítimos ya que son poco representativos para la sociedad en su conjunto pues ellos ya convertidos en autoridades terminan gobernando para una minoría cuyo interés está encaminado a concentrar aún más la riqueza en unos cuantos, en contraste con la gran mayoría de pobres que solo recibirá  migajas del presupuesto público a través de programas sociales simuladoramente asistencialistas. Así de patético y preocupante termina siendo un país que en su gran mayoría asume actitudes apáticas.

Hasta ahora no se  ha demostrado que las actitudes sean hereditarias  o que respondan a un patrón por origen social o estrato económico. Lo que si se ha documentado es que la actitud empática o apática es una capacidad humana  que termina siendo el resultado de una decisión personal en el pleno uso del  libre albedrio. 

Posiblemente la idiosincrasia o el entorno social pueda influir en la decisión de asumir determinada actitud, cuando se crece entre personas que creen las circunstancias son inamovibles y que no se puede manipular el día a día, el mismo destino o que la pobreza e infelicidad son un castigo fatal infringido a toda una familia por pecados o desaciertos de nuestros padres o abuelos puede caer la pesada losa del desaliento y desesperanza. 

Asumir una actitud empática y proactiva acompañada de un propósito como el de aspirar a un nuevo cargo en el empleo, ya sea donde se está o ampliando el horizonte de posibilidades, emprender un negocio en donde la actividad que realicemos nos apasione permitirá que nuestra actitud supera a nuestras habilidades y compense nuestras limitaciones demostrándonos que aún lo imposible se hace posible.

La actitud empática y proactiva con propósito es altamente rentable aumenta nuestro potencial, ayuda a establecer prioridades,  agrega valor a nuestro trabajo,  pronostica nuestro futuro, se busca, alcanza y enseña el rumbo, pues si no se sabe hacia dónde se va se puede llegar a cualquier lugar sin dinero y sin amor.  

1 comentario:

Unknown dijo...

hace tiempo fui a comer al Restaurant Tachula y el servicio estando presente el Lic. Hugo Fernandes como dueño dejo mucho que desear ya que la comida fue mala la atención deficiente y cuando intente reclamar simplemente aun que me reconoció ni siquiera me pidió una disculpa mientras en la zona de sofá donde estaban unas chicas hipiess donde se quitaron los zapatos para subirlos pies al sofá a ellas por ende les fue a rendir pleitesia mientras yo estaba con mi hijo observando la actitud empatica de el debo de reconocer que a el hace muchos años cuando compensaba su carrera política el era una persona muy sencilla ,detallista y profesional hoy muchos lo desconocemos totalmente ajala cambie y vuelva hacer el mismo de antes por que podría seguir luchando para representarnos algún día ....