EN POCAS PALABRAS....
.- Nadie pone en duda la capacidad y facultad legal de la Dirección General de Tránsito del Estado manifestada a través de sus elementos, oficiales, agentes y demás, para infraccionar, detener, sancionar e incluso 'levantar' los vehículos para llevarlos a un corralón.
La pregunta es: ¿con qué le responden ellos a la sociedad?.
Es excelente que si alguien se estaciona en un sitio prohibido, le caiga la grúa en segundos y lo 'arrastre'. Es excelente que si un (a) motociclista circula sin casco, le caiga encima todo el peso del reglamento de Tránsito. Es excelente que cualquier, cualquier infracción al reglamento sea inmediatamente detectada por el ojo avizor del o de la oficial en turno y oportunidad y proceda de inmediato a emitir la boleta respectiva.
Pero la pregunta continúa: ¿qué hacen ellos por la sociedad?.
Porque no se les ve dirigiendo el tránsito en escuelas a las horas de ingreso y salida; no se les ve en los severos problemas de tráfico pesado en horas pico; no se les ve controlando a autobuses y taxis cuyos choferes manejan y al mismo tiempo hablan por celular; no se les ve haciendo labor de promoción en escuelas sembrando el conocimiento de las leyes generales de tránsito. Y esta lista podría crecer.
Pero la pregunta sigue en pie: ¿qué o para qué le sirve Tránsito del Estado a la ciudadanía?, ¿solamente para que le infraccione, le persiga, le 'arrastre', le castigue, le sancione, le envíe al corralón...?..
No....pues entonces a muchos nos gustaría ser "oficiales" de Tránsito.....
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