EDITORIAL

MIGUEL ÁNGEL YUNES YA PERDIÓ LA CABEZA

Nunca se dudó que la actitud del aún gobernador Miguel Ángel Yunes Linares se recrudeciera una vez que perdió la elección el pasado 1 de Julio, ya que es harto conocida su posición de represión y aplastamiento contra cualquier cosa que esté en su contra.

Lo que no se esperaba es que fuera tan pronto y que las primeras víctimas de su enloquecida ira, fueran un grupo de empresarios que llegaron a Palacio de Gobierno a buscarlo para entablar un diálogo con él, buscando recordarle su compromiso contraído en periodo de campaña hace dos años en donde les ofreció reconocer y pagar los adeudos que como Gobierno se tenía con ellos.

Pero no. Al contrario, al mejor estilo del Duartismo que simplemente ordenó en 2014 desalojar a golpes a maestros que ocupaban pacíficamente la Plaza Lerdo, la noche de este lunes, con lujo de violencia, mentadas de madre, empujones, amenazas y una gran vejación por parte de más de 50 policías uniformados así como por personas vestidas de civil altamente agresivos, los empresarios tuvieron que salir del Palacio de Gobierno en medio del escarnio gubernamental.

Una incongruencia advertida desde todos los frentes, luego de que el mismo Gobernador, asistido por un grupo de choque encabezado por su hijo Miguel Ángel Yunes Márquez, en noviembre de 2016 tomó por asalto el Palacio de Gobierno y se atrincheró en él durante casi 30 días, presumiendo que en los pasillos hasta durmió el entonces dirigente nacional del PAN Ricardo Anaya.

Pero los tiempos cambian. Ahora este grupo de empresarios que lo único que pidieron era HABLAR CON ÉL, los rechazó desde la mañana y ya por la tarde, encendidos los ánimos de los reclamantes, cometieron el "error" de anunciar que "si era necesario quedarse a dormir en Palacio, hasta que el Gobernador los atendiera", no dudarían en hacerlo.

La táctica no fue sorpresa. Miguel Ángel Yunes Linares ha venido gobernando al Estado en base al terrorismo, primero psicológico y si éste no alcanza, a la intimidación directa, siempre con miras a demostrar que "él y sólo él" es la Ley.

Así es que los empujones, madrazos, mentadas de jefa y amenazas que les propinaron a los ilusos empresarios esta noche, en realidad fue una cuenta barata.

Claro que Yunes Linares ya tiene la justificación de sus actos. Dice que "no los recibió porque los mandó MORENA". ¡ Vaya ¡.